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PRIORITY

Seguridad: un Pacto Europeo de Seguridad

En un mundo convulso que se enfrenta a guerras, pandemias, aumento de la delincuencia y amenazas cibernéticas, pedimos un Pacto Europeo de Seguridad para una Europa que proteja a sus ciudadanos. Sabemos lo que hay que hacer; ahora es el momento de cumplirlo. Necesitamos una verdadera defensa europea común, compatible con la OTAN, y debemos invertir en las tecnologías de defensa del futuro. Tenemos que proteger mejor nuestras fronteras exteriores y gestionar mejor los flujos migratorios, pero también garantizar nuestra seguridad interior en la lucha contra el terrorismo, la delincuencia organizada y las amenazas espaciales e informáticas. Ante un nuevo orden geopolítico, Europa también debe proteger nuestros intereses comprendiendo y reforzando nuestro papel en el mundo, hablando con una sola voz en la escena mundial. En la próxima legislatura, queremos un Pacto Europeo de Seguridad para proteger a todos los europeos.

Seguridad: un Pacto Europeo de Seguridad

Proteger

  • Nuestras fronteras exteriores, con FRONTEX como guardia de fronteras y costas de pleno derecho, dotada de competencias de ejecución. Defendemos y promovemos el Nuevo Pacto sobre Migración y Asilo para luchar contra los tratantes de personas, detener la migración irregular y abordar las causas profundas de la migración mediante soluciones europeas comunes, como las infraestructuras físicas, y acuerdos con países vecinos como Túnez o Marruecos.
  • Nuestras industrias estratégicas frente a la competencia desleal, así como nuestras infraestructuras críticas frente a las adquisiciones extranjeras y las presiones ilegítimas de países autocráticos. Esto incluye el diseño de una Estrategia Portuaria Europea para proteger los puertos marítimos.
  • A nuestros niños en el espacio digital, mediante la creación de un entorno en línea seguro con un Plan de Acción Europeo contra el ciberacoso y el maltrato infantil. El acoso en el espacio en línea debe considerarse un delito en toda Europa.
  • A nuestras niñas y mujeres, tipificando como delito la violencia contra las mujeres en toda Europa y aplicando las mismas normas para castigar a los autores.
  • Nuestro Estado de Derecho, con un nuevo instrumento para el Estado de Derecho en Europa en manos del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE): el TJUE se encargaría de revisar periódicamente la situación en los Estados miembros y tendría potestad para imponer sanciones, incluso económicas, si fuera necesario. Debemos evitar que el Estado de Derecho sea políticamente mal utilizado o ignorado por cualquier Estado miembro.

Crear

  • El impulso para que la Cooperación Estructurada Permanente (CEP) se intensifique con el fin de trabajar hacia una Unión Europea de Defensa con fuerzas europeas integradas en tierra, mar y aire para 2030, complementando las fuerzas militares nacionales, alineadas con el nuevo modelo de fuerzas de la OTAN, con una capacidad de despliegue rápido de una fuerza permanente y de disponibilidad inmediata. Esta fuerza debería ampliarse gradualmente para convertirse en un Cuerpo de Ejército Europeo mediante la asignación de más tropas y elementos de fuerza procedentes de los Estados miembros, profundizando sus vínculos operativos y su interoperabilidad. Deberíamos promover la política común de seguridad y defensa y reactivar la industria militar europea, garantizar la movilidad militar en toda la Unión e incrementar el gasto nacional de los Estados miembros en defensa y en nuevas inversiones conjuntas.
  • Una verdadera Unión Europea de Defensa con un presupuesto específico y aumentado, un comisario europeo de Defensa y una formación de Defensa en el Consejo de la Unión Europea.
  • Una Agencia Europea de Proyectos de Investigación Avanzada en Defensa para impulsar y promover la investigación en innovaciones y tecnologías del futuro con fines de defensa. Al mismo tiempo, queremos eliminar los obstáculos a la financiación de las empresas europeas de defensa y alcanzar un objetivo de un 35 % de adquisiciones conjuntas de equipos de defensa.
  • Un cuartel general conjunto civil-militar a escala europea que combine los instrumentos civiles y militares para aprovechar plenamente el enfoque integrado de la Unión en la gestión de crisis, desde la planificación estratégica hasta la realización efectiva de la misión u operación.
  • Una brigada cibernética europea plenamente operativa para luchar contra los ciberataques y las nuevas formas de guerra híbrida de los terroristas, la delincuencia organizada, las injerencias extranjeras y la desinformación, y que proteja nuestras infraestructuras críticas, la libertad de los medios de comunicación y la independencia del poder judicial.
  • Una estrategia de seguridad de la Unión a largo plazo y con visión de futuro con respecto a China, el Mediterráneo y África. Europa debe definir de forma proactiva su papel en el mundo y hacer valer sus intereses, especialmente en lo que se refiere a la migración incontrolada, la energía y el suministro de materias primas, y hacer frente al auge del autoritarismo, desarrollando su capacidad de resistencia y alertas tempranas eficaces antes de que surjan los conflictos. Debería crearse un Consejo Europeo de Seguridad, compuesto por los ministros de los Estados miembros responsables de la seguridad interior y exterior, para responder rápidamente a las emergencias y desarrollar un enfoque integrado de los conflictos y las crisis.

Fortalecer

  • Europol para que se convierta en «Eurocops»: una agencia policial plenamente operativa y con poderes coercitivos cuando se trate de luchar contra el terrorismo, los abusos a menores, la corrupción y la delincuencia organizada transfronteriza, incluida la trata de seres humanos y el contrabando de drogas y armas. Apoyamos el principio de libre circulación, pero no para los delincuentes. También queremos mejorar la protección de las víctimas del terrorismo y reforzar la orden de detención europea.
  • Nuestra democracia, defendiéndola contra la desinformación y las injerencias extranjeras, salvaguardando la independencia de nuestros sistemas judiciales, la libertad de los medios de comunicación y el funcionamiento de nuestras instituciones democráticas. Europa debe seguir a la vanguardia del apoyo mundial a la democracia y crear, junto con la OTAN, un Centro para la Resiliencia Democrática.
  • La diplomacia de la Unión, adaptándola al siglo XXI: queremos crear el cargo de un ministro de Asuntos Exteriores de la Unión, dar un papel más importante al Servicio de Acción Exterior, promover un puesto común de la Unión en el sistema multilateral de las Naciones Unidas y otras instituciones multilaterales y pasar de la unanimidad a la mayoría cualificada en las decisiones de Política Exterior y de Seguridad.
  • A nuestros ciudadanos con un Plan Europeo de Resiliencia ante Contingencias Civiles para mejorar la capacidad de recuperación de los europeos en caso de crisis, como la COVID‑19, y para garantizar que las autoridades locales y estatales puedan reaccionar más rápidamente y de forma selectiva ante las emergencias.
  • A Ucrania y a nuestros vecinos del Este ante la guerra de agresión de Rusia. Queremos alcanzar una paz sostenible con una estrategia sólida frente a Rusia y un Escudo de Seguridad Europeo conjunto UE‑OTAN. Una estrategia europea de ampliación con visión de futuro para Ucrania, Moldavia y los Balcanes Occidentales que evalúe individualmente a cada país candidato en función de resultados concretos, salvaguardando al mismo tiempo la necesaria capacidad de integración de la Unión.