Prevenir la radicalización y promover la integración

Tras los ataques terroristas que ha sacudido a Europa en los últimos años, somos la primera fuerza política que comprende la urgencia de reforzar las infraestructuras de seguridad de Europa. El terrorismo es una amenaza mundial que debe abordarse a escala local, nacional, europea, regional y mundial.

Estamos a favor de políticas decididas que eviten la radicalización e integren a las personas para evitar que se conviertan en terroristas. Las compañías de Internet tienen también la responsabilidad de participar en esta tarea, impidiendo la difusión de propaganda terrorista y cooperando con las autoridades policiales.

Si los países de la UE quieren combatir con eficacia la creciente amenaza de los «combatientes extranjeros» deben armonizar cómo responder de forma inmediata a este problema. El Grupo PPE ha liderado esfuerzos para poner en práctica controles sistemáticos sobre todas las personas que cruzan las fronteras exteriores de la UE, con el fin de identificar a los combatientes extranjeros que vuelven al territorio de la Unión.

Medidas concretas para respaldar los esfuerzos nacionales

Aunque la lucha contra el terrorismo es competencia exclusiva de los Estados miembros, la UE debe hacer todo lo posible para facilitar la labor de las autoridades policiales nacionales. Con este fin, hemos apoyado la actualización de un marco jurídico sobre terrorismo a nivel continental, en el que queden tipificados claramente como delitos la planificación y la financiación de ataques terroristas, así como viajar al extranjero con fines terroristas.

También vamos a adoptar medidas para actuar contra la financiación del terrorismo, fomentando que los países de la UE compartan información con mayor eficacia. Hemos apoyado firmemente a EUROPOL, nuestra agencia de seguridad, en sus esfuerzos por hacer la de UE un centro de intercambio de inteligencia e información que sea clave para la prevención de los ataques terroristas.

Todos los años, la policía denuncia alrededor de 30 millones de delitos en la UE, sin contar las infracciones menores. Este es el motivo por el que continuamente luchamos por leyes que se centren en las víctimas, para garantizar que se satisfacen sus necesidades, para proteger su dignidad y su seguridad.