Las nuevas normas sobre datos sanitarios salvarán vidas

A última hora de la noche de ayer, los negociadores de los grupos políticos del Parlamento Europeo y de los Estados miembros alcanzaron un acuerdo sobre una nueva ley que facilitará el intercambio de datos sanitarios en toda la Unión Europea.

"Es un gran éxito para el Grupo PPE. Las nuevas normas cambiarán realmente la vida de algunas personas que necesitan atención urgente en el extranjero. Si, por ejemplo, de repente tienes una reacción alérgica y pierdes la capacidad de hablar, esta nueva ley hará posible que los médicos encuentren rápidamente la información que necesitan en tu historial electrónico. Me alegro de que haya prevalecido la razón", ha declarado el eurodiputado Tomislav Sokol, negociador jefe del Parlamento sobre el Espacio Europeo de Datos Sanitarios.

"El Espacio Europeo de Datos Sanitarios es un salto adelante fiable, digno de confianza y eficiente en la asistencia sanitaria y la investigación. Significa la ciudadanía sanitaria europea", afirmó Javier Zarzalejos, eurodiputado y negociador del Grupo PPE en la Comisión de Libertades Civiles.

"Esta es la decisión más importante para la protección de la salud en la Unión Europea en muchos años, si no nunca. El Espacio Europeo de Datos Sanitarios nos beneficiará a todos. Cuando viajemos al extranjero, si así lo decidimos, podremos compartir fácilmente nuestros datos médicos, como enfermedades previas o alergias, y además se traducirán al instante con ayuda de la inteligencia artificial. Esto salvará muchas vidas, ya que los médicos podrán evaluar mucho mejor la situación y se evitarán diagnósticos erróneos y malentendidos. También es esencial para la investigación médica que los datos médicos puedan fluir por toda Europa según criterios uniformes de protección de datos", añadió Peter Liese, eurodiputado y portavoz del Grupo PPE en la Comisión de Medio Ambiente.

Las nuevas normas también garantizarán mejores resultados en el diagnóstico y el tratamiento, reducirán los errores médicos y evitarán pruebas innecesarias.

"Al hacer posible que los datos se compartan de forma responsable entre los Estados miembros, contribuiremos a una comprensión más profunda de las enfermedades e impulsaremos el desarrollo de nuevos medicamentos y dispositivos médicos", concluyó Sokol.